|
La Última Cena
Jesús como buen judío, celebraba todos los años la fiesta
de la Pascua. De niño la celebraba con su familia, y ya de
grande, la celebraba reunido con sus discípulos. Pero hubo
una Pascua muy especial para Jesús: la que celebró antes de
su muerte.
Era la última cena de Jesús con sus amigos, la noche de la
despedida. En esta noche, Jesús instituyó la Eucaristía, que
es la Pascua de la Nueva Alianza.
Jesús en la última cena introdujo algunos cambios muy
importantes en la comida pascual:
“Luego tomó el pan, lo partió y se lo dio a sus discípulos
diciendo: ‘Esto es mi cuerpo que se entrega por ustedes.
Hagan esto en memoria mía’. Después de la cena, hizo lo
mismo con la copa, diciendo: ‘Esta copa es la Nueva Alianza
sellada con mi Sangre, que se derrama por ustedes’”.
(Lc 22, 19 y 20).
Jesús utilizó el pan y el vino de la comida pascual, para
realizar un gesto que anticipaba lo que al día siguiente
sucedería en la cruz: Jesús se ofrecería al Padre, como el
verdadero cordero Pascual: Ofrecía su Cuerpo y su Sangre para
la salvación de todos los hombres, para sellar una nueva y
definitiva Alianza. |