Es la fiesta en la que recuerdan que Dios los había liberado de Egipto haciéndolos pasar por el mar Rojo. La palabra Pascua significa ‘paso’. La Pascua judía es la liberación de la esclavitud. La fiesta comienza en la tarde del 14 del mes Nisán (después del 21 de marzo), cuando aparece la primera luna llena de primavera.
El padre de la familia se dirigía al Templo a ofrecer un cordero. Entretanto, la esposa preparaba la casa para la cena. Y hacía unas especies de galletas, como panes sin levadura. El cordero y los panes les recordaban a la cena que Dios les había mandado comer en Egipto la noche en la que los iba a liberar. También preparaban unas hierbas amargas (diferentes tipos de ensaladas), que les recordaban los penosos años en que habían sido esclavos en Egipto. En la mesa de la Pascua judía, era muy importante el vino. Todas las familias debían tener sobre la mesa varias copas servidas con un buen vino, que les recordaba la alegría de la llegada a la tierra prometida, en donde pudieron plantar viñas y cosechar el suelo. La fiesta comenzaba cuando regresaba el padre de familia. Comenzaban a cantar salmos y, después, el padre bendecía a Dios por los alimentos diciendo una oración especial sobre el pan y el vino. Los niños se sorprendían por esta fiesta que se celebraba siendo ya bien de noche, y solían preguntar a qué se debía todo eso y en qué se diferenciaba esa noche de las demás noches del año. Y el padre, tomando solemnemente la Palabra, comenzaba a explicar los grandes milagros que el Señor había hecho por su pueblo cuando los hizo salir de Egipto. |